CCOO de Castilla y León | 20 abril 2024.

Villalar 2024

2021-01-19

Casi 7.000 empleados y empleadas exigen a la Consejería de Sanidad que sus condiciones laborales sean negociadas

    El compromiso público de la consejera de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Verónica Casado, y del propio presidente de la Comunidad, Alfonso Fernández Mañueco, de no activar el Decreto que eliminaba los derechos de las personas trabajadoras sanitarias, y que les impone medidas sin que exista ningún tipo de negociación previa con sus representantes, debe trasladarse a la práctica de inmediato. Los sindicatos CCOO, USAE, CESM y SATSE, todos ellos pertenecientes a la Mesa Sectorial de Sanidad de Castilla y León, exigen a ambos que se sienten a negociar ya.

    19/01/2021.
    Foto CCOOCyL.

    Foto CCOOCyL.

    Casi 7.000 personas trabajadoras piden con su firma que SACYL se siente a negociar con sus representantes sindicales sus condiciones laborales y no se lleve a cabo la imposición de medidas que no hacen más que cercenar sus derechos laborales: suspensión de las vacaciones y descansos, solicitar voluntarios para realizar cribados y vacunaciones en sus días de descanso sin conocer en qué condiciones y que cobertura legal van a tener para realizar esos servicios...

    Los representantes legales de las personas trabajadoras sanitarias de los sindicatos CCOO, SATSE, CESM y USAE, organizaciones sindicales que pertenecen a la Mesa Sectorial de Sanidad de Castilla y León, y que siguen unidas con el objeto de aunar sus fuerzas en contra del atropello a los derechos laborales hacia los trabajadores de SACYL (se han descolgado UGT y CSIF), continúan denunciando la manipulación y maltrato de la Consejería de Sanidad de Castilla y León hacia sus profesionales y hacia los representantes de los mismos. Es por ello que han denunciado el Decreto que se publicó el pasado 14 de noviembre, y han interpuesto un requerimiento ante la falta de negociación por parte de los representantes de Sacyl.

    Hoy en día la desorganización en la Consejería de Sanidad es absoluta. Cada gerencia está actuando de una manera diferente. En algunas de ellas se está amenazando con eliminar el disfrute ahora en enero de las vacaciones que ya a los trabajadores y trabajadoras no se les permitió disfrutar en el año natural; se está organizando la gestión de la vacunación contra la Covid-19 a ritmos diferentes sin dar una información oficial, ni haber informado previamente a los representantes de las personas trabajadoras; existen diferentes formas de actuación de los servicios de prevención ante los profesionales que han sido contactos estrechos con un positivo; se le pide al personal que se apunten a las bolsas de voluntarios, entes que no han sido negociados y tampoco se les detallan las condiciones laborales y retributivas de las mismas; no existe un plan de conciliación para los trabajadores y trabajadoras sanitarias, al igual que se habilitó en Función Pública para el resto de personal funcionarios, para el caso de que sean tutores de un menor en aislamiento por contacto estrecho con un positivo.

    Este despropósito y desorganización está haciendo mella en un colectivo que ya está agotado y desesperado; que han finalizado el 2020 en ocasiones con 200 o 300 horas de más por encima de su jornada de trabajo habitual; que la Gerencia Regional de Salud, de nuevo sin negociar, pretende que se les compense, en función de la categoría, a un precio incluso por debajo del salario mínimo interprofesional, y que afrontan con temor la presión asistencial que se va a producir en las próximas semanas.

    En numerosas ocasiones se recoge en los medios de comunicación las diferentes formas de actuar de los 17 servicios de salud. Pues bien, en Castilla y León se aplican 11 criterios diferentes en función de la gerencia donde se preste servicios, porque desde la Gerencia Regional de Salud, Sacyl, no les interesa sentarse a negociar unos criterios unificados y de esta manera posibilitan que cada gerencia actúe a su antojo.

    CCOO, SATSE, CESM y USAE, organizaciones sindicales que constituyen mayoría en la mesa sectorial, siguen manteniendo su compromiso con los trabajadores y trabajadoras de Sacyl. No van a tirar la toalla y no van a parar de negociar, reclamar y luchar por un trato justo hacia el personal sanitario, colectivo que han demostrado con creces su capacidad de trabajo y profesionalidad a lo largo de esta pandemia, y que no se merecen el trato que están recibiendo por parte esta Consejería.