CCOO de Castilla y León | 30 junio 2025.

2022-06-10

CCOO del Hábitat considera que se ha dado un gran paso para la conquista del derecho al paro de las empleadas del hogar

    Ayer, 9 de junio de 2022, el Congreso de los Diputados ha ratificado, con 325 votos favorables y tan sólo una abstención, el Convenio 189 de la Organización Internacional del Trabajo, sobre el trabajo del servicio del hogar. Es el primer paso para que obtengan el derecho al desempleo por el que CCOO del Hábitat ha luchado desde hace más de diez años, cuando la OIT adoptó el convenio que ahora se ha ratificado.

    10/06/2022.
    Foto CCOOCyL

    Foto CCOOCyL

    Desde entonces CCOO del Hábitat Castilla y León ha llevado a cabo múltiples campañas específicas implicando a las administraciones, tanto locales como autonómica, en la demanda de este Convenio cuya ratificación “es un paso imprescindible para la mejora de los derechos de este colectivo, hasta ahora invisible, infravalorado y casi completamente feminizado” en palabras de la secretaria general de la Federación del Hábitat, Lourdes Herreros. En Castilla y León hay más de 16.000 personas trabajadoras dadas de alta en el sistema especial de empleadas de hogar, con casi un 97% de mujeres, de las cuales aproximadamente el 40% son personas de nacionalidad extranjera. Sin embargo, este sigue siendo uno de los sectores laborales con más empleo sumergido.

    El trabajo doméstico es imprescindible, por lo que CCOO siempre ha exigido “su equiparación total en derechos con el resto de personas trabajadoras por cuenta ajena”, algo que hasta ahora no se había logrado. Para CCOO del Hábitat de Castilla y León la fecha de ayer quedará grabada como un hito y una oportunidad para continuar reivindicando los objetivos de la organización para la equiparación en derechos de este colectivo. El primero de ellos es que puedan cobrar el desempleo lo antes posible, pero también que no haya ningún salario por debajo del SMI y que todas ellas puedan contar con el preceptivo alta en la Seguridad Social, evitando así la economía sumergida.

    Igualmente exigimos dotar de competencias a la Inspección de Trabajo para perseguir el fraude en las retribuciones y cotizaciones y para garantizar sus condiciones de seguridad y salud en el trabajo, con especial incidencia en los riesgos psicosociales. A partir de este primer paso creemos que deben quedar equiparadas totalmente en la cotización con el resto de trabajadores y que se debe revisar las formas de extinción del contrato y sus consecuencias. Por último, exigimos el derecho a la negociación colectiva de las empleadas de hogar.